Palabras al vuelo | Poemas de Fredi Javier Benítez Molina


PALABRAS AL VUELO
He acumulado un millón de vidas
difusas dentro de mí, 
pero nunca encontré una coincidencia.
-Fernando Pessoa

                        I

Al paso por esta vida de ilusiones empedradas
                                               entre ustedes
soy el que hace una fiesta de palabras
            lanza sus ojos al fondo
desteje los años
hilando la mortalidad de los días.
           
Se inclina ante la catedral de los amaneceres
            dobla las rodillas por cobardía
bebe voces en el rio del tiempo
y escupe en el polvo que cubre tu memoria.
 
El que se alimenta con carne de sueños
            y retoza en el vientre abierto de la esperanza
que pare caminos
para seguir andando
            consume lo que el medio produce
intenta seguir el grito

que fue semilla de libertad del mártir
y el silencio del sabio
            que preña la soledad que anda.
 
El que se siente lejos estando cerca
            mientras la raíz de la tumba se alarga
hacia donde nada crece
donde nada muere.

II
A veces, soy palabra que huye de la voz
una huella sin camino
la sombra que se oculta del amanecer
una imagen en el altar sin alma
 un relámpago que sorprende en verano.
 
A veces, soy el martillo que da en el dedo
que sostiene el clavo
que nos crucifica
y cierro los ojos
para proteger las niñas del lobo feroz.
 
A veces, soy puerta por la que nadie pasa
guerra apaciguada
nudo ciego que se amarra
aroma que repele todo lo que muerde.
 
A veces, soy el fantasma atrapado en el espejo
de tu memoria
que sonríe entre el hollín
de caricias y miradas antiguas.          
 
A veces con la sangre agitada
en la vena que huye de la herida.
inicio infiernos 
                        para salvarnos del arrebato
y salto al vació que se aparta.
 
A veces me embarco en una pequeña muerte
para cruzar la noche
de la que he nacido tantas veces
y vivido de la misma forma.
 
A veces siento que soy
                      un embarazo en el vientre del mundo. 


RESIDUAL

A Dana Valeria
 
El amanecer se extiende
en sus pupilas.
Una sonrisa abre sus alas.
Ella, da los buenos días
y se bebe mi nombre.

Con el bronce del mirar encendido
encuentro la orilla
de la voz que me nombra.


INTERESTATAL

Si un día te da por mirarte fijamente
en el espejo de la tarde
buscando entre la hierba crecida
presencias de ayer
quizás encuentres
esa parte salvaje mía huyendo
                        de su existencia.
 
Si un día te da por preguntar
sabrás que elegí un sitio para caer
no muy lejos
a un lado de lo que no se levantó más.
Sabrás cuanto quise morir perdido
en tu cartografía de recuerdos.
Sabrás cuantas veces caí de cabezas
intentando volar.
 
Si un día escuchas me oirás
provocando todo el ruido posible
para seguir vivo.
 
Si un día se te da por contestarme
…dime de quién es la mano
que nos moldea y acomoda
en tal o cual patria
                      pariendo y enterrando hijos.


ENTRE SOMBRAS DE LUCES

En la profundidad que se bebe la luz de los ojos
yace el cadáver del fuego que lo habito
engordando el polvo.
 
La humedad del brillo acaricia su rostro caldeado
            por el afán de los días en los que tienta
el borde negro de la luz que lo encierra.
 
Es un habitante gris de los ecos
con la edad que permite la supervivencia
flota en el manto que lo envuelve
y busca la puerta oculta intentando huir
de los rumores que lo aturden.
 
Recoge y cría palabras que caen de otras lenguas
imagina las formas del fuego
 y la sinfonía le habla
ríos oscuros nacen de sus ojos
 
Hay pájaros avivando el origen del canto
en las ramas del tiempo
la oscuridad lo mira
día tras día cabalgar
con el peso muerto de la luz a ciegas


Fredi Javier Benítez Molina (Corinto, Morazán)

Vive en San Francisco Gotera, Morazán. Abogado de profesión, casado padre de dos hijos. Fue parte del Taller Literario Zarza, realizó publicaciones en Diario Co latino y revistas Locales, Laberinto, La Voz entre otras. Actualmente es Empleado del Ministerio Publico, forma parte y es fundador Junto al Poeta Daniel Eguizábal del Taller Literario “Café de Tinta”.
     Su faceta de Escritor inicio en la época de Estudiante Universitario hace más de veinticinco años, ha escrito varias obras, entre ellas: «Desde La Palabra Herida» (poesía) (Juegos Florales de Morazán, 1997); «Desbrujando el Tiempo» (cuento) (Ganadora de Certamen Literario de la UES, 1998); «Permanente Eco de un sueño Azul» (poesía) (1999); «Síntomas de Un Poblador» (poesía) (Taller Literario Zarza).
    Obras inéditas: «Loza y Maíz» (poesía); «Mal Disfrazado» (Teatro); «Pupila Impar» (poesía) 2020; «Las cabañas de la hoguera y otros cuentos» (cuento); «Espuma Negra» (Microrrelatos); «La Nada que Vocea y aturde» (poesía) (Ganador del Premio Nacional de Literatura de la UES 2022). 

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